Un estudio detecta que la enfermedad arterial coronaria no obstructiva no está exenta de riesgo de eventos cardiovasculares futuros
El trabajo multicéntrico, realizado sobre más de 3.000 enfermos durante tres años y medio, ha sido liderado por investigadores de la UMA y el CIBERCV
Categoría: Investigación
Un estudio elaborado por profesores de la Universidad de Málaga sobre 3.265 pacientes con afectación coronaria determina que los que presentan lesiones coronarias no obstructivas no están exentos de riesgo y sufrieron más complicaciones cardiovasculares que los enfermos con arterias coronarias normales, aunque menos complicaciones que los del grupo de coronarias con lesiones obstructivas.
Tras un seguimiento prolongado, cuya media fue de 43 meses, se evaluó la presencia de alguna de las siguientes complicaciones cardiovasculares: infarto agudo de miocardio, ictus, hospitalización por insuficiencia cardiaca y muerte cardiovascular.
Los resultados observados permitieron establecer que los pacientes con lesiones coronarias no obstructivas, evaluados de manera conjunta, presentaron más complicaciones cardiovasculares que aquellos con arterias coronarias normales, y menos que los del grupo con lesiones obstructivas. Se analizaron además tres grupos específicos (los diabéticos, los que habían tenido un infarto previamente y las mujeres), observando esa misma gradación del riesgo (mínimo en pacientes con coronarias normales, intermedio en pacientes con lesiones no obstructivas, y elevado en pacientes con lesiones obstructivas) en los pacientes no diabéticos, en las mujeres y en los que habían sufrido un infarto agudo de miocardio.
Los datos que se desprenden de este trabajo, liderado por investigadores de la UMA y del Área del Corazón del Hospital Universitario Virgen de la Victoria -adscrita al Instituto de Investigación Biomédica de Málaga (IBIMA) y al Centro de Investigación Biomédica en Red de Enfermedades Cardiovasculares (CIBERCV) del Instituto de Salud Carlos III- refuerzan la importancia clínica de las lesiones coronarias, sean o no obstructivas, fundamentalmente en determinados subgrupos estudiados.
Primera causa de muerte
La enfermedad cardiovascular se considera la primera causa de muerte a nivel mundial. En España, Andalucía encabeza las cifras de muerte por esta causa.
Dentro de los distintos espectros de la enfermedad cardiovascular, la coronaria (generalmente denominada cardiopatía isquémica) es una de las más relevantes por su elevada morbimortalidad. Los pacientes con sospecha de cardiopatía isquémica son frecuentemente estudiados mediante la técnica de imagen denominada coronariografía, que permite evaluar la presencia o no de obstrucciones en las arterias coronarias. Se considera que la cardiopatía isquémica queda confirmada tras la caracterización de lesiones coronarias obstructivas, que se definen como un estrechamiento que reduce el calibre del vaso más del 70% de su calibre inicial.
Aunque inicialmente se propuso que las lesiones coronarias no obstructivas no conferían mal pronóstico, en los últimos años hay mucha controversia al respecto, pues se han relacionado con un pronóstico adverso, especialmente en determinados subgrupos como los diabéticos, los que han sufrido un infarto agudo de miocardio, o las mujeres.
Participantes
El estudio que ha analizado estos datos es multicéntrico de ámbito andaluz y en él han participado –además de los investigadores de la UMA, Clínico y CIBERCV- otros siete centros andaluces: Hospital Universitario Virgen de Valme, Hospital Universitario Juan Ramón Jiménez, Hospital Universitario Reina Sofía, Hospital Universitario Puerta del Mar, Hospital Universitario Virgen de las Nieves, Hospital Universitario Virgen del Rocío y Hospital Regional Universitario de Málaga.
Los investigadores del Área del Corazón del Hospital Universitario Virgen de la Victoria que participaron en este trabajo fueron Jorge Rodríguez Capitán, Andrés Sánchez Pérez, Mercedes Millán Gómez y Manuel Jiménez Navarro. La financiación necesaria para el mismo se obtuvo mediante una convocatoria competitiva de la Junta de Andalucía y también a través de la Fundación Andaluza del Corazón.